Saltar al contenido
Time of Grace en Español

El único filtro que necesitas

En Facebook, uno de mis amigos compartió una de las mejores citas que he visto atribuidas a Abraham Lincoln: “No creas todo lo que lees en Internet”.

(¿Entiendes? ¿Verdad?)  Divertido 😉.  Supongo que si Abraham Lincoln viera el estado actual del Internet, sugeriría que tampoco deberías creer todo lo que ves.

Probablemente ya sabes que la gente publica las mejores imágenes posibles de ellos mismos. No vemos las fotos de los malos días, los malos ángulos, la mala iluminación. Y gracias a la tecnología, los filtros pueden cambiar el color, crear una imagen más estática de ti, emparejar tonos de piel, quitar las manchas, suavizar las arrugas y ocultar esos pequeños defectos.

Aunque no uso filtros en mis redes sociales, entiendo la tentación de querer lucir mejor de lo que uno es. Todos sabemos que tenemos defectos y preferiríamos que no los tuviéramos. Sin embargo, al final, sabemos que estos filtros en realidad no solucionan nada. Simplemente cambian nuestra apariencia en las imágenes. Todavía vemos la realidad en el espejo todos los días.

Por eso el filtro de Dios me resulta sorprendente.

Mira, en el fondo sabemos que hay cosas menos superficiales que nos gustaría cambiar de nosotros mismos. Como nuestros errores y fracasos, y sabemos que no importa cuánto intentemos encubrirlos, nuestras tendencias naturales a ser egocéntricos siguen ahí. Porque no podemos hacer nada al respecto, Pero Dios sí lo hizo.

Envió un filtro y este es el momento perfecto para hablar de ello. Durante seis semanas al año, muchos cristianos hablan de la Cuaresma.  Es un momento para concentrarse en la realidad de que “al que no tuvo pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él” (2 Corintios 5:21).

Puede ser una frase confusa, ¿no? Básicamente, está diciendo que Dios le dio a Jesús un filtro, el filtro de las personas, y Él le da a la gente un filtro de Jesús.

Cuando Jesús vino a la tierra, vivió durante más de 30 años sin defectos, sin pecados, ni errores.  Ni una sola vez se despertó en medio de la noche y se arrepintió de sus palabras del día anterior. Nunca se despertó por la mañana y se prometió a sí mismo que nunca volvería a hacer lo que hizo anoche. Pero Dios puso nuestro filtro humano lleno de pecado sobre Jesús. Dios miró todas las formas en que nos equivocamos y culpó a Jesús por ellas, castigándolo y abandonándolo en la cruz.

Cuando Jesús dijo: “Consumado es” y resucitó de entre los muertos, Dios dijo que cuando crees en Él, “tu vida ahora está adentro en  Cristo con Dios” (Colosenses 3:3). Eso significa que Dios te da el filtro de Jesús. Cuando Dios te mira, Él ve que:

Tu pecado se ha ido.

Tu relación con Él se restablece.

Eres hermosa y preciosa.

Eres una nueva creación.

Estás en paz con Él.

Eres santo.

Eres amado.

Eres su creación hecha a mano, diseñada para bendecir a las personas que te rodean y darle la gloria.

Este es el único filtro que realmente necesitas.

Linda Buxa es una escritora que no se toma el tiempo de perder el tiempo con los filtros de sus fotografías. Además, ella no tiene una gran imagen , como la que tienen la mayoría de la gente popular. Por otra parte, nunca la han acusado de ser una belleza andante.