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Time of Grace en Español

Honrar a Dios en todo

Hay tantas maneras en las que tú y yo podemos usar TODAS las herramientas a nuestro alcance para honrar a Dios en nuestra vida cotidiana.

Podemos honrar a Dios con sinfonías.
Podemos honrar a Dios con manualidades y oficios.
¡Podemos honrar a Dios con guisos! (O, en mi caso, con comidas listas de clubes de membresía).

Estas ideas pueden parecer insignificantes en el gran esquema de las cosas, pero la realidad es que cada pequeña acción que hacemos puede apuntar a Dios, incluso cuando no tenemos la oportunidad de explicar nuestras acciones en una conversación personal. Aprendí esta verdad al estudiar el libro de Ester.

Ester es un libro de la Biblia donde el nombre de Dios no se menciona NI UNA SOLA VEZ. Sin embargo, toda la historia apunta a Dios de un millón de maneras sutiles pero significativas. Es el relato de una joven judía que Dios usa para salvar a su pueblo de la destrucción. La historia de Ester es una aventura increíble, llena de valentía, traición, belleza, odio y amor, que demuestra la fidelidad de Dios de formas poderosas pero discretas.

Y aunque el nombre de Dios no aparece directamente en el libro, su influencia está entretejida en cada giro y vuelta de la trama.

Puedes ver el poder de Dios en la autoridad que se le otorga a Ester. Puedes notar la influencia del Espíritu Santo en los consejos sabios que su tío piadoso le da a Ester en situaciones difíciles y aterradoras que ella no está preparada para enfrentar. Puedes celebrar la fidelidad de la promesa de Dios de un Salvador cuando (¡alerta de spoiler!) el pueblo judío es salvado de una sentencia de muerte impuesta por un decreto real dictado por un funcionario gubernamental codicioso.

Esta idea ha estado rondando mi mente últimamente, ya que Time of Grace está lanzando una nueva serie sobre el tema del dinero. Esto me llevó a hacerme una pregunta bastante profunda:

¿Alguien podría ver la influencia de Dios en mi vida solo con mirar el estado de mi cuenta bancaria?

Y aquí está el giro que quizá no veías venir. No estoy hablando de medir el amor de Dios basado en lo que él me ha dado. Estoy diciendo que, al igual que el libro de Ester, nuestros hábitos de gasto pueden testificar sobre nuestra confianza en la autoridad de Dios, la sabiduría del Espíritu Santo y la fidelidad de las promesas de Dios. La forma en que usamos nuestros tesoros y talentos en esta vida cuenta una historia que difunde el mensaje de esperanza de Dios a todos los rincones de la tierra. Muestra que no nos aferramos desesperadamente a cada minuto o centavo, sino que compartimos generosamente porque creemos de todo corazón que Dios es exactamente quien dice ser: el Camino, la Verdad y la Vida.

Quizá tu estado de cuenta bancaria ya muestra esto en la forma en que das fielmente a tu iglesia cada mes. O tal vez sea evidente en la manera en que has apoyado iniciativas de recaudación de fondos de otros ministerios cristianos.

Pero hay muchas maneras de usar tus finanzas para testificar sobre la bondad de Dios. Aquí tienes algunas ideas fuera de lo común para reflejar la bondad de Dios en la “historia” de tu estado de cuenta:

  • Usa la línea de notas de una transacción digital o cheque para escribir: “Jesús te ama”.

  • Compra el próximo regalo de cumpleaños de un ser querido en un negocio pequeño que honre a Dios, como una librería cristiana o un artesano que ama a Jesús.

  • Ponle a tu cuenta de ahorros el nombre de tu versículo bíblico favorito. (La mayoría de los bancos ofrecen esta opción de “apodo” gratis a través de su app o con ayuda de un asesor).

  • Destina una parte de tus ingresos mensuales a apoyar una agencia de adopción o cuidado temporal basada en el evangelio.

  • Abre una nueva cuenta de ahorros específicamente para prepararte para un viaje misionero. (Y no te detengas ahí; una vez que hagas uno, podrías quedar enganchado).

  • Pregunta en tu iglesia si hay alguna necesidad específica a la que puedas dirigir tus donaciones, algo que se alinee con tus pasiones o propósitos dentro de un ministerio o contexto comunitario.

¿Qué otras maneras se te ocurren para que tu fe se refleje en tu estado de cuenta? Me encantaría escuchar tus ideas. O, mejor aún, comparte tus ideas con tu vecino, tus amigos, tu banco o tu grupo pequeño de estudio bíblico. ¡Desafíense mutuamente a encontrar formas nuevas y creativas de compartir el amor de Dios con cada recurso que se nos ha dado!

En el momento culminante de la historia de Ester, ella tiene la oportunidad de hablar para salvar la vida de su pueblo judío o permanecer en silencio. Su tío la anima a ser valiente diciéndole: “¿Quién sabe? Tal vez llegaste a ser reina precisamente para un momento como este” (Ester 4:14 NVI).

Puedes ver cada dólar bajo este mismo lente. ¿Quién sabe? Tal vez recibiste esta bendición financiera para este momento, desafío u oportunidad específica.